Como si de un resorte se tratara, algo se activa en cada una de las personas que nos detectan un cáncer. Un interruptor en tu cerebro se activa, para decirte que tienes que seguir, que no te puedes rendir, que esto no se acaba, que hay que luchar sin tregua ni cuartel… La sonrisa, el ánimo, el humor hacen que cada día sea diferente y que la batalla sea más llevadera.
No es ninguna suerte pasar por este calvario pero algo dentro de nosotros cambia para siempre, para ayudarnos a afrontar el resto de nuestras vidas como si cada día fuese el último, para beberse la vida a tragos y disfrutarla con todas nuestras fuerzas.
Solos o en compañía debemos tener siempre la cara más alegre y feliz, a veces para irradiar fuerza en nuestros familiares y amigos, otras (las más), para creernos de verdad que podemos superarlo.
Hoy mi granito de felicidad para todos los que estáis como yo y para todos los que nos soportáis, nos ayudáis y lucháis unidos en cuerpo y alma a nosotros.
Hoy la otra cara del cáncer se llama vida, amor, sonrisa y coraje.
Hoy te enseño mi cara, mañana enséñame tú la tuya para que esto no pare.
Gracias a todos los que estáis a nuestro lado.
--Montse Moro--
No es ninguna suerte pasar por este calvario pero algo dentro de nosotros cambia para siempre, para ayudarnos a afrontar el resto de nuestras vidas como si cada día fuese el último, para beberse la vida a tragos y disfrutarla con todas nuestras fuerzas.
Solos o en compañía debemos tener siempre la cara más alegre y feliz, a veces para irradiar fuerza en nuestros familiares y amigos, otras (las más), para creernos de verdad que podemos superarlo.
Hoy mi granito de felicidad para todos los que estáis como yo y para todos los que nos soportáis, nos ayudáis y lucháis unidos en cuerpo y alma a nosotros.
Hoy la otra cara del cáncer se llama vida, amor, sonrisa y coraje.
Hoy te enseño mi cara, mañana enséñame tú la tuya para que esto no pare.
Gracias a todos los que estáis a nuestro lado.
--Montse Moro--